La iglesia siempre es visible pero tiene aspectos invisibles desde nuestra perspectiva.
El pueblo afirmó su amor por Dios, y Dios afirmó su presencia en medio de ellos.
La regeneración es la implantación de vida en la persona para que pueda responder a Dios positivamente.
El reformador Juan Knox y otros cinco ministros escribieron la primera confesión de la Iglesia de Escocia: la Confesión Escocesa.