En su última denuncia de los falsos maestros, Pablo contrasta el mensaje de ellos con el mensaje de la cruz.
Dios prometió que la gloria posterior de su templo sería mayor que su gloria pasada.
En su efusivo agradecimiento por la iglesia en Tesalónica, los autores describieron una iglesia digna de ser imitada.
La escatología del Antiguo Testamento fue la esperanza de la llegada de la edad venidera.