El ser humano es una unidad que es esencialmente cuerpo y alma (o espíritu).
Además de la justificación, los que confían en Cristo reciben la adopción como hijos, y son la descendencia de Abraham y herederos de Dios.
El profeta terminó su libro anunciando su plan de alegrarse en Dios aunque llegara la calamidad.
Aunque no fue escrito por Atanasio, el credo que lleva su nombre declara la cristología que uno tiene que creer para ser salvo.