Las señales del fin tienen el propósito de mantenernos siempre preparados.
Por medio de la adopción, Dios Padre nos otorga el mismo privilegio de ser hijos que Jesucristo disfruta.
Los capítulos 6 al 9 de la Confesión fluyen lógica y teológicamente del pecado al pacto y luego a Cristo y al libre albedrío...
Siendo hijos de Dios, los creyentes en Jesucristo disfrutan tres de los mismos privilegios que el Hijo de Dios tiene ante su Padre.