La resurrección de Cristo garatiza la resurrección del cuerpo en el día final.
La escatología del Antiguo Testamento fue la esperanza de la llegada de la edad venidera.
El día del Señor será no solo una destrucción universal sino también una renovación universal.
La Biblia es un libro enteramente humano y enteramente divino, así como es la persona de Jesuscristo.