Después de escuchar el plan de Dios, el profeta Habacuc se atrevió a decirle a Dios que no debía hacer eso.
Por medio del profeta Hageo Dios cuestionó las prioridades de su pueblo.
La sexta sección de la Confesión de Fe de Westminster cubre la eclesiología (la doctrina de la iglesia, los sacramentos y la disciplina eclesiástica).
En respuesta a la segunda queja del profeta, Dios anunció que el justo por su fe vivirá.