La fe es el único y el apto instrumento de la justificación.
Cuando falsos maestros proclaman errores sobre la venida del Señor, los cristianos no debemos alarmarnos o dejarnos engañar.
Después de notar que tan poco el pueblo había logrado, Dios lo reanimó con su presencia.
Después de una introducción a la carta de 2 Pedro, este primer episodio se enfoca en la presentación de Cristo como Dios y Salvador.