Los estados finales de los ángeles y de los humanos son para la gloria de Dios.
Los cristianos llegarán a la culminación de su salvación y llegarán perseverando en la gracia.
Dos pruebas de la doctrina de justificación por sola fe son la misma experiencia de los Gálatas y el ejemplo de Abraham.
Además de los atributos incomunicables que solo Dios posee, hay atributos comunicables que él comparte en una medida menos con los seres humanos.