El pueblo afirmó su amor por Dios, y Dios afirmó su presencia en medio de ellos.
Producto de la reforma en Suiza, la Segunda Confesión Helvética es una de las más amplias y populares de las confesiones reformadas.
El templo no pudo efectuar una limpieza adecuada sino que señaló el medio de limpieza definitiva que era por venir.
Cristo está a la diestra de Dios Padre, ejerciendo sus tres oficios de profeta, sacerdote y rey.