Después de decirnos lo que Dios nos ha concedido, Pedro nos insta a aplicar toda diligencia para crecer en nuestra fe.
Siempre ha habido breves declaraciones de fe, las cuales anticiparon los credos de la iglesia.
Aunque no fue escrito por Atanasio, el credo que lleva su nombre declara la cristología que uno tiene que creer para ser salvo.
La historia nos enseña lecciones importantes sobre los costos, las bendiciones y el fin de las misiones.