Después de decirnos lo que Dios nos ha concedido, Pedro nos insta a aplicar toda diligencia para crecer en nuestra fe.
La aparente demora de Jesús en regresar no es un problema para los cristianos sino una oportunidad.
Cinco lamentaciones burlonas anunciaron la destrucción del opresor.
Sin sutileza alguna, Pablo empezó esta carta con una fuerte reprensión, porque los Gálatas se habían desviado del único evangelio para creer otro evangelio...