Dios nos ha concedido todo lo que necesitamos para vivir la vida cristiana y tener comunión con él.
Amenazados por la falsa enseñanza los cristianos tenemos que mantenernos firmes en la enseñanza apostólica y seguir creyendo la verdad.
En contraste con teorías subjetivas sobre la muerte de Cristo, la Biblia enfatiza que objectivamente logró la salvación de los suyos.
Si la ley no abroga la promesa y no salva, ¿para qué la dio Dios? En Gálatas 3:19-25, Pablo da una respuesta a esta...