En la conclusión de esta serie, Entre Dios y su pueblo, consideramos el Nuevo Pacto, promulgado por medio de Jeremías y otros profetas y cumplido por Jesus. El Nuevo Pacto es el cumplimiento de todos los pactos anteriores, y especialmente rectifica las deficiencias del Pacto de Ley. Ofrece no solo el completo perdón de los pecados sino también un nuevo corazón de obediencia a la ley de Dios.
Tanto la fe como el arrepentimiento son necesarios y al mismo tiempo acciones humanas y regalos de Dios.
Hay cuatro posturas sobre el milenio: posmilenialismo, amilenialismo, premilenialismo histórico y premilenialismo dispensacionalista.
Cuando falsos maestros proclaman errores sobre la venida del Señor, los cristianos no debemos alarmarnos o dejarnos engañar.