Aunque el Señor va a venir como ladrón en la noche, no sorprenderá a los que son del día y no de la noche.
Dios convirtió pasitos de fe y de obediencia en una bendición enorme.
No importando cuánto hayamos avanzado en la vida cristiana, siempre podemos crecer más y más.
Todos los beneficios de la redención se realizan en la glorificación.