Aunque fue la cosa más vergonzosa para Pablo, él frecuentemente mencionó que había sido perseguidor de la iglesia, y lo hizo para demostrar cuán grande es la gracia de Dios. Si Dios pudo salvar a Pablo, puede salvar a cualquiera.
Los peligros gemelos de sub- y sobre-contextualizar se pueden disminuir con una definición adecuada de la contextualización.
La imagen de Dios no es un aspecto de Dios o del ser humano sino el ser humano mismo.
Sin sutileza alguna, Pablo empezó esta carta con una fuerte reprensión, porque los Gálatas se habían desviado del único evangelio para creer otro evangelio...