Aunque fue la cosa más vergonzosa para Pablo, él frecuentemente mencionó que había sido perseguidor de la iglesia, y lo hizo para demostrar cuán grande es la gracia de Dios. Si Dios pudo salvar a Pablo, puede salvar a cualquiera.
La vida y la muerte de Cristo satisficieron los justos requisitos de la ley de Dios.
Jesús y los escritores de del Nuevo Testamento frecuentemente citaron leyes del Antiguo Testamento y las aplicaron a los cristianos.
El ordo salutis (orden de salvación) en los capítulos 10-13 de la Confesión de Fe de Westminster incluye los elementos del llamamiento eficaz, la...