La voluntad de Dios para los cristianos es nuestra santificación, particularmente en el área de la sexualidad.
Aunque el Señor va a venir como ladrón en la noche, no sorprenderá a los que son del día y no de la noche.
La iglesia es una, santa, católica y apostólica.
Es posible sub-contextualizar y caer en el obscurantismo, o sobre-contextualizar y caer en el sincretismo.